Son sobres de cartas nunca enviadas.
Para qué estar, si ya no me quiere.
Alma tan blanca, corazón azul.
El sol asoma y miro por la ventana.
Las ramas relucen, gran plenitud.
Despertadores con alas sobrevuelan tejados.
Con las rimas tontas que acompañan mis días
Con letras de calles hago ¿poesía?
A ver con la calle Renaixença que me invento.

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Puedes escribirme a piliarandanos@gmail.com para encargarme un cuento, poema o palabra esdrújula, aunque Pessoa te diría que las últimas son altamente ridículas.