La torpeza para con las emociones, estética de lo germinal -mi base de todo-, confunsión intencionada de goce y libertad, búsqueda armónica de los opuestos, atrapamiento en las estampas mediterráneas y cotidianas, invencible felicidad extrema, flujo del imán hacia el País Vasco -siempre- y hacia lo oriental, rollo filipino. Automatismo inconsciente que ni los surrealistas, constante mirada interior, enumerar o listar, instantánea como un graffitti en la arena, universo de lo raro, animalidad, ecos de salvajismo, delicadeza, excitada alegría de lo Bello que no es lo bello sólo, atracción hacia las musarañas y las musas, caligramar pensamientos, no comprensión sí contemplación, entrega a lo fantástico pero devoción a lo cotidiano. Sentir que todo tiene raices y fundirme con ellas, todo lo antidibujístico, todo lo no impostado, no disfraz, no vulgar, no inmaduro, sí cotidiano, sí aereo o liviano, sí infantil no infantilismo, no grave, ante lo impuesto el libre albedrío, ante las escenas injustas la contención, ante la posesión, el amor sin condición. Pero sobretodo ante una gota de agua, una piedra pequeña o un puñado de arena una reverencia aunque parezca no tener sentido.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)

Me ha encantado pili...antidibujístico. Very you.
ResponderEliminarmencanta mencanta mencanta.
ResponderEliminarYo que he vivido contigo, te reconozco en cada palabra.
y yo a ti también te reconozco...mhmhm
ResponderEliminar