(Nana a una madre que ya no está)
Sigo aquí medio filipina medio membrillo.
Recordando cuando seguíamos al sol
en tu seiscientos.
Ponías voces y te creía.
Creía que eras el sol, la luna, las estrellas.
Hasta que te apagaste -poco a poco- como una de ellas.
En mis brazos te dormiste para siempre.
Entre nosotros.
Qué se tiene que enseñar a un niño.
Aprender todo con cariño.
Aún recuerdo tu Ulises.
Tu Aloma.
Tu regaliz escondido.
Tu: 'nunca juzgues sin saber ni aún sabiendo.'
Tu: 'nunca juzgues sin saber ni aún sabiendo.'
Tus vidrios -de Intramuros- de colores.
Tu carcajada con Chinín o Mary Paz.
Hasta el año que viene.
Hasta mañana.
Hasta esta noche, junto a mi cama.
Los tres hermanos unidos están,
como esa mañana,
como esta mañana.
Como siempre:
Los tres hermanos unidos están,
como esa mañana,
como esta mañana.
Como siempre:
Babalic mamá.

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