Cojo el tren con desdén, lloro, río, lloro, río, mis vecinas de butaca creen que soy una pecera, una escultura, su portera. Voy al bar compro aceitunas y un cruasán. Pienso en la sabia decisión de mi combinación. Saco el reloj de mi hermana, pinta que no llego ni a las tres de la mañana, llama mi padre, llama mi hermano, llama mi primo, desconecto el teléfono, todo un atino. Me pongo los cascos y la película, ruido ensordecedor, voy al servicio, esa cadena me saca de quicio. Abro la bolsa saco un libro, trabajo en un geriátrico y va de un hospicio, miro un ¡Hola !de la señora de enfrente no me hace caso y me enseña los dientes, llevan carmín y me da reparo, empiezo a hacer rimas y ya no paro, reverberaciones, metáforas, frases y exclamaciones. Cáspita que aburrimiento, me salen cursis a lo María Sarmiento, leo consejos para cuidar tu piel y tu pelo, qué viajecito señor revisor deme conversación dígame qué colonia usa, ¿tiene hijos?, ¿a veces se ducha? ¿ha volado en avión? use peluca de terciopelo se le ve el cartón, la cadena Los Tigres lo vende barato, o póngase una flor tenga la mía, no se preocupe tengo muchas de varios colores, no me escucha. Miro por la ventana, verde verdor, coches, tractores, casas, campos, verduras y coliflores, mustios plásticos, nubes tóxicas, amapolas desoladas, basura acumulada, coches abandonados, calles siniestras, se acerca mi estación, grafitis con nombres extraños, pienso en comerme una pera, el tren aminora va despacio ,llego a la hora, se abre la puerta, llegaré casa y estará Bea. FIN ( menos mal eh? )
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Puedes escribirme a piliarandanos@gmail.com para encargarme un cuento, poema o palabra esdrújula, aunque Pessoa te diría que las últimas son altamente ridículas.